domingo, 21 de abril de 2013

TOCAR


¿Hasta qué punto es importante el tacto sobre la piel de los Sonámbulos...?, me preguntan.  
Tras meditar la respuesta, escrutar los recuerdos, descifrar los mensajes espontáneos que contribuyen a mi ya dilatada historia, les contesto que lean lo que ARS escribe en La mano de fuego al respecto. 

Para el Sonámbulo, sentir las yemas de los dedos de la amada, notar que la química de sus deseos superan cualquier barrera cutánea, le provoca ese brillo característico de la intoxicación amorosa. Nota celos del viento, enojo y hasta cierto temor de sí mismo, también,  queriendo detener el tiempo, congelar ese instante único en todas las ocasiones que lo experimenta...
En cierta forma le recuerda la emoción, casi alucinatoria, que le ocasiona el aroma del jazmín en el mes de abril en Sevilla, el desasosiego y turbación interior que le impide un reposo estable. 
El hipertocamiento se prodiga entre los que serán devotos de la casta, sintiendo lentamente esa embriaguez de quien no ha probado nunca.

2 comentarios:

  1. Tócame!
    el tacto es primordial en los sonámbulos!
    La mano del alfarero descubre a la vez que quiere dar forma.
    Intercambio de energía subcutánea, afloración de sensibilidad adormecida...
    todo un placer.

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  2. Sonámbulo22 mayo, 2013

    Siempre es halagador sentir que tus pensamientos se transmiten por el interior de lo que tus manos crean, mi admirado Fernando. Imagino que tus palabras impregnan tu barro creador y que tus obras portan palabras, susurros quedantes para que los que los tenemos junto a nosotros los oigamos mientras los observamos, nos hablen hipnóticos mientras nos evadimos de esta realidad tantas veces nebulosa...

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