Acudir al pragmatismo es implacablemente cada vez más necesario en una vida que se desearía fuera real con los deseos que antes se tuvo. No obstante, esa realidad choca con la necesidad de querer abstraerse, aunque fueran solo unas horas, y disfrutar de una vida que se escapa minuto a minuto, sin contemplaciones. Y es que resulta triste estar informado de lo que nos rodea, lo que se avecina, y a lo que por más que se quisiera es muy difícil por no decir imposible reorientar. Vivir en comunidad tiene esas trampas a las que se nos obliga a aceptar, aunque fuera con cada vez más inconsciencia...
Este blog, esta ventana abierta al mundo del deseo cada vez cuesta más en darle sentido...o tal vez no. Seguiré pensando.
Esta ventana al mundo, en muchas ocasiones, da sentido a mi vida.
ResponderEliminarGracias Sonámbulo