Fue una atracción a primera vista. Cuando abrí el poemario Estrategias del deseo, de Cristina Pieri Rossi, (de la que ya he colocado alguno de sus pequeñas grandes obras en este espacio de coloquio con vosotros) en una tarde de octubre de 2004, me enganchó. Supe que a partir de entonces, sus poemas iban a formar parte de mi vida en períodos concretos, o no, no sé. De lo que sí sabía con aplomante seguridad era que había redescubierto a una gran estudiosa del alma del ser humano. La leí en alguna otra ocasión pero, lo admito, no le presté demasiado tiempo. No era el momento. Seguro. Todas las cosas, todos los seres, tienen un momento. Que lo descubramos nos ocupa toda una vida. Solo hay que esperar...
Y fue cuando abrí en la FNAC el poemario con disciplencia no menos curiosa por la página 62 y apareció PARANOIA:
Me preocupo por tu cuerpo
tus leucocitos tus linfocitos
el páncreas la glándula pineal
y la velocidad de eritrosedimentación.
Observo angustiadamente
tu palidez
y el color de tu orina.
Temo que un agente patógeno
-un virus, una bacteria maligna-
lo deteriore lo destruya
como un terremoto
un aluvión
una guerra
otra catástrofe cualquiera.
Todos los días pasan cosas así.
Todos los días muere lentamente
lo que más amo.
Tras ella siguió PARANOIA II, PERFUME, ADICCIONES , EXUBERANCIA, LE DIGO A MI SEXO, ONCE DE SEPTIEMBRE, MADRID 11 DE MARZO...
Lo he prescrito a muchos Sonámbulos ya, y hoy también lo hago, tras releerlo una vez más, con múltiples anotaciones mías sobre los márgenes, con post its de colores separando los mejores poemas ayer de los óptimos hoy, con mi olor sobre sus páginas levemente amarillentas impresas en A & M Gràfics, S.L. de Santa Perpètua de Mogoda, provincia de Barcelona, como todos Uds. saben.
Qué disfruten.
Me lo compré y me encantó. No la conocía.
ResponderEliminarGracias por la información